![]() |
![]() |
Relatos y comentarios sobre lo que acontece en la vida de esta bitacorera. | ![]() |
La emoción del bohemioA quienes sean capaces de comprender historias como ésta.Hace tiempo oí a mis padres contar esta anécdota. Todavía hoy persiste en mí la emoción al recordarla. Transcurrían las primeras décadas del siglo XX en mi ciudad, la misma donde naciera el gran pintor Julio Romero de Torres. El joven Paco, pariente mío, se encontraba en dicha capital realizando estudios de Bellas Artes. Alternaba su vida de brillante estudiante con la de joven alegre a quien, en compañía de sus numerosos compañeros y amistades gustaba disfrutar de frecuentes salidas con las mozas de la época. De mentalidad abierta, generosa cabellera ondulada, se les oía felices preparando las salidas con las "nenitas", como ellos las llamaban. De entre todo el grupo de amigos "los cotorrines" que así se autodenominaban, uno en concreto era el más íntimo: se llamaba Rafael. Llegó el horror de repente, comenzó una guerra fraticida y cambió el rumbo en la vida de estos radiantes jóvenes. Durante largos años estuvieron ambos separados geográficamente. El octogenario Paco se encontraba un día en la sobremesa de un almuerzo, su profunda mirada azul cansada. Casualmente llegó mi padre acompañado por Rafael, para hacer posible un encuentro entre los dos viejos artistas. Tal fue la emotiva sorpresa experimentada por Paco que, a pesar de su ejemplar corrección, no fue capaz de levantarse de la silla donde se encontraba tomando café, para abrazar a su amigo de juventud a quien siempre tuvo presente. El llanto se lo impidió. 14:42 | Toñi Flamil | 2 Comentarios | #
Referencias (TrackBacks)URL de trackback de esta historia http://tamesis.blogalia.com//trackbacks/39726
Comentarios
|
MI LISTA DE HISTORIASVisitas desde el 4 Septiembre 2005: Web Counter |
![]() |
|
![]() |